El marketing digital es una disciplina que ha evolucionado a pasos agigantados y son muchas las empresas que se han sumado a esta ola para alcanzar sus objetivos de negocio y mejorar las relaciones con sus clientes; sin embargo, hay muchas creencias que damos por ciertas y que debemos desmitificarlas para tomar mejores decisiones. Aquí te contamos algunas de ellas.
El objetivo del marketing digital es vender
Hacer sonar la caja registradora constituye uno de los objetivos más importantes de las empresas, pero no es el único. Para que diseñes una estrategia de marketing es necesario que comprendas las diferentes etapas del ciclo de compra de tus clientes y que definas las acciones que vas a llevar cabo en cada una de ellas.
Vender implica, previamente, aumentar la visibilidad de tu marca en aquellos públicos que aún no te conocen y generar confianza en los clientes potenciales que están considerando adquirir el producto o servicio que ofreces.
La clave está en ser relevantes proporcionando el contenido correcto, a la persona correcta y en el momento correcto. Si solo te enfocas en vender y no aportas valor en los diferentes puntos de contacto de tus clientes, podrías estar en desventaja con respecto a tus competidores.
Por otro lado, recuerda que el marketing no solo persigue ventas a corto plazo, sino, sobre todo, relaciones duraderas con los clientes a través de experiencias memorables.
El éxito depende de la aplicación de recetas mágicas
¡Definitivamente no! Si bien existen las llamadas “buenas prácticas”, hay que considerar que cada negocio y mercado tienen sus propias particularidades.
La mejor manera de saber qué estrategias te funcionan y cuáles no es poniéndolas a prueba, para luego afinarlas y adaptarlas a tus propias circunstancias. Tu mejor aliada en este sentido será la analítica. Recuerda: probar, medir y optimizar serán las claves para mejorar tus resultados.
Por lo tanto, te recomendamos no seguir los consejos al pie de la letra y tener cuidado con los atajos milagrosos, no existen.
El marketing digital es gratis
Una de las ventajas que ofrecen los medios digitales con respecto a los medios tradicionales es que son asequibles para todo tipo de negocios, independientemente de su tamaño; no obstante, esto no quiere decir que la gestión de estos canales no implique inversión.
Si quieres alcanzar tus objetivos de notoriedad de marca, interacción, ventas y retención de clientes debes invertir tiempo, dinero y esfuerzo en capacitación, planificación, desarrollo de contenidos, manejo de herramientas profesionales, creatividad de piezas gráficas, pautas publicitarias, captación de talentos, entre otros. Todo esto, definitivamente no es gratis. No esperes grandes resultados a costo cero.
Cualquier persona puede gestionar las redes sociales
El manejo de las redes sociales a nivel empresarial es una tarea que requiere de mucha responsabilidad. El community manager es un profesional capacitado que tiene a su cargo muchas funciones, entre ellas podemos mencionar la creación de contenido relevante, la generación de conversaciones inteligentes con la comunidad, el cuidado de la reputación de la marca, la elaboración de reportes de resultados, entre muchas otras más.
¿Delegarías esta función a cualquier persona que no tenga la preparación necesaria y que no tenga las habilidades mínimas de relaciones públicas para convertirse en la voz de tu marca? ¡Piénsalo!
El email marketing es cosa del pasado
Preguntémosles a los bancos, a las compañías de seguro, a los grandes retailers online si están de acuerdo con esta afirmación. Según Statista, en el 2021 se recibieron y enviaron más de 320 billones de correos electrónicos diarios en todo el mundo y se espera que en el 2025 la cifra llegue a más de 365 billones.
Sin lugar a duda, el email es uno de los medios más poderosos del marketing digital porque suelen generar buenas tasas de conversión y retornos más altos que otros canales. Esto se debe principalmente a los bajos costos y las grandes posibilidades de personalización.
Eso sí, para que estas campañas funcionen debes solicitar el permiso de los usuarios, enviar mensajes relevantes, segmentar bien tus listas, manejar una frecuencia de envío apropiada y elegir una herramienta profesional para este fin.
El SEO consiste en incluir palabras clave en tu web.
Google tiene un objetivo claro: proporcionar los mejores resultados a sus usuarios. Por eso, si quieres posicionarte en los resultados orgánicos de búsqueda tienes que convencer a Google de que tus páginas tienen la mejor respuesta a dichas consultas.
Colocar las palabras claves en tus páginas es importante porque ayudan a Google a entender tu contenido, pero no es suficiente. Tienes que desarrollar contenido relevante y ofrecer una buena experiencia a los usuarios que visiten tu página, esto incluye una buena velocidad de carga, adaptabilidad con los dispositivos móviles, una clara estructura del sitio, seguridad, entre otros factores.
Asimismo, debes lograr autoridad mediante la consecución de enlaces que apunten a tu web para que Google vea que tu contenido es de confianza y merece la pena posicionarse.
Como puedes ver, el SEO es una disciplina que tiene cierto grado de complejidad y que incluye muchos factores que van más allá de las keywords.
Para mejorar la posición de los anuncios en Google tienes que ofertar más que los competidores.
¡No necesariamente! Para determinar la posición de los anuncios, Google utiliza un valor denominado Ad Rank que se calcula a partir de la oferta que hace cada anunciante y otras variables como la calidad del anuncio en el momento de la subasta, el contexto de la búsqueda del usuario, el impacto esperado de las extensiones y otros formatos de anuncios.
Por tal motivo, aunque tus competidores tengan ofertas más altas que la tuya, podrás posicionar mejor tus anuncios, incluso a un precio menor, si eliges palabras claves adecuadas y anuncios relevantes.
Más es mejor
¡Voy a crear cuentas en todas las redes sociales! ¡Voy a revisar todas las métricas! ¡Haré mucho contenido! ¡Lanzaré campañas publicitarias en todos los medios posibles! Ojo, El marketing digital no se trata de hacer más, sino de hacerlo mejor.
Menos campañas, más eficiencia.
Menos contenido, más relevancia.
Menos datos, más análisis.
Menos canales, más compromiso.
A veces, menos es más.
Esperamos que este artículo te haya sido útil. Cuéntanos, ¿Qué otros mitos del marketing crees que deben aclararse?